El Cine puede Esperar....y, "sobre esperar", decía la actriz Elena Irureta, "habíamos aprendido mucho en los últimos meses...";
Así comenzaba, el pasado 17 de Septiembre, la Gala Inaugural de la 69 Edición del Festival de Cine de San Sebastián.
En el marco de una situación aún muy complicada y llena de incertidumbre hasta el último día, con serias medidas de seguridad, y férreos protocolos, que impedían, un año más, completar el aforo de una inmensa Sala, se compensó esa merma de público, con una muy emocionante Ceremonia, repleta de guiños al cine y a la música, con numerosos homenajes (como los de Luis Gasca, ex director del certamen y el del cineasta Bertrand Tavernier, que llegó a calificar al Festival, como el Mejor del mundo, en palabras del Director del Festival de Cannes, Thierry Frémaux, ahí es nada...).
Homenajeado fue también, el emblemático programa de RTVE, Días de Cine, que ya hace 30 años que nos viene acompañando a través de la pequeña pantalla, y la película Nomadland, de la directora Chloé Zhao, a la que se entregó el Premio Fipresci.
Pero el Gran Homenaje de la noche iría a parar a la actriz Marion Cotillard, a la que se entregó uno de los Premios Donostia que tenía reservado el Certamen y que recibiría de la mano de su amiga Penélope Cruz, fundiéndose ambas, en un sentido abrazo, gesto que se reivindicó esa noche y que se materializó con la emoción que supone un Premio de semejante envergadura a la trayectoria, en este caso, de la actriz francesa.
Me quedo con esa imagen...con el maravilloso video resumen de su carrera, y ese "Non, je ne regrette rien", con el que se cerró y que puso la piel de gallina a los allí presentes...; Con todos esos homenajes...con el momentazo de un Carlos Saura sobre el escenario haciendo una foto al respetable, antes de dar paso a su "Rosa, Rosae, la Guerra Civil", que cantaba Labordeta...Y con ese Abrazo que se convirtió en protagonista de una noche a la que pondría broche final, Zhan Yimou, leyenda del cine, que abrió la Edición, con el bienintencionado film,"One Second", un homenaje más, en este caso, a la magia del cine....;
Y retomando las palabras de Elena Irureta, efectivamente, habíamos aprendido a esperar... pero lo más importante que hemos aprendido, es que, "todas y todos merecemos ser los guionistas de nuestras propias vidas...";
Comenzaba así, una semana de buen cine, que, en este caso, ya no podía esperar....
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