lunes, 21 de octubre de 2019

MIENTRAS DURE LA GUERRA. ALEJANDRO AMENABAR. 67 SSIFF.

El sábado 21 de septiembre tuvo lugar la proyección del último trabajo del director Alejandro Amenábar, "Mientras dure la guerra", que también firma el guión junto con Alejandro Hernández. 
  La película ha generado gran polémica en su estreno, por la temática que aborda, el comienzo de la Guerra Civil Española, y lo que ello implica que, grosso modo, se plantea, como una depuración del régimen (republicano) anterior y desemboca en un "Golpe a los golpistas" como manifestó su director, en rueda de prensa.

  Amenábar, consciente, de que esta película, que escribió hará unos tres años, se antoja en el momento actual  como "pertinente" o "inoportuna", aborda el momento "más inoportuno" de una persona, para ser coherente con su propia vida: Nos referimos al escritor y filósofo, Miguel de Unamuno y su célebre discurso en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca.  Y para llegar a ese final, el cineasta, en ese escenario de la historia de España,  ahonda en el personaje de Unamuno, de una manera impecable,  mostrando a un hombre, que cuestionaba todo lo que veía, que vivió un tormento existencial motivado por la coyuntura político social del momento, y que le llevó a enfrentarse con amigos, vecinos y hasta con su familia...;
   La película está muy bien realizada, posee una manufactura espectacular, al más puro estilo "spielberg" en determinados planos y secuencias, y cuenta con un elenco de actores a cual mejor: Desde el personaje de Franco, interpretado desde una contención no ridiculizante por Santi Prego (que cuenta estuvo seis meses trabajando la voz con el propio Amenábar, para a través de la misma, moldear su personaje e imprimir su seña de identidad y carácter), hasta el del general Millán-Astray, en cuya piel, nunca mejor dicho,  se pone un Eduard Fernández, que lejos de caricaturizar al personaje,  le dota de una humanidad grotesca y voluptuosa, temperamental en el fondo y en las formas,  y que va creciendo a medida que discurre el filme; Sin olvidar el de Nathalie Poza, Tito Valverde, Patricia López  Arnaiz, Luis  Zahera, etc... Y por supuesto, el magistral Karra Elejalde, en el papel de Unamuno, que en un registro opuesto al que nos tiene acostumbrados, define un personaje que llega directo al espectador desde su primera aparición, y se instala en la historia de nuestro cine con sobresaliente.
                     




         














         




                    

miércoles, 16 de octubre de 2019

ALEGRA ESA CARA. "JOKER". 67 EDICIÓN SSIFF.

  "Antes creía que mi vida era una tragedia, pero me he dado cuenta de que es una comedia".

             Arthur Fleck.
                            Joker.

 Me gustaría empezar el capítulo de crónicas de la 67 Edición del Festival de cine de San Sebastián,  por el final, y más concretamente por una de las sorpresas que venía anunciando su Director, José Luis Rebordinos para esta ocasión, y que no fue otra que, la proyección de la película que se llevó el máximo galardón en la pasada Bienale de Venecia: "Joker" de Todd Phillips.

 El autor de la saga "Resacón en las Vegas" nos ofrece su particular visión de los orígenes de un villano de cómic, Joker, en una propuesta radicalmente opuesta a la que estábamos acostumbrados, firmando una auténtica Obra Maestra, por muchos motivos: No sólo por la potencia que tiene como película (dirección,  guión,  interpretación,  fotografía, etc...) sino por las sensaciones que produce su visionado.

  Este peculiar viaje hacia el corazón de las tinieblas de su personaje principal, Arthur Fleck  interpretado de modo sublime Joaquín Phoenix,   sumerge al espectador, en toda una experiencia que va más allá de la mera contemplación complaciente del tortuoso camino que lleva a su protagonista a la locura,  a transformarse en el Joker que da nombre al filme; Toda una sacudida emocional que Phoenix consigue trasladar más allá de la pantalla, logrando que el espectador empatice con él y con el devenir de los acontecimientos, para poner de manifiesto lo difícil que resulta controlar, según qué circunstancias,  que salga a la luz, el "Joker" que llevamos dentro.

   Y mientras uno asiste a tal disección de la propia naturaleza humana y de la sociedad en que se desenvuelve: El abuso al más débil, en sus múltiples y aberrantes modalidades; La humillación constante; El intento frustrado de integración en una sociedad descompuesta; La ausencia de referentes o patrones familiares; La corrupción política y el desencanto cuasi-apocalíptico etc...), la película es un homenaje al cine más auténtico y a sus grandes maestros: Desde Scorsese ("Taxi Driver", "El Rey de la Comedia" y el guiño a su actor fetiche, Robert de Niro, que protagoniza una de las escenas más intensas e impactantes del filme); Hitchcock ("Psyco"), Kubrick ("La Naranja Mecánica", "El Resplandor"), William Friedkin ("The French Connection"), hasta el cine más clásico a través de la figura de Chaplin...: A todo eso "sabe" "Joker", y de ahí que sea una auténtica gozada, pues te reconcilia con la idea de cine como arte, y a mayor abundamiento, nos regala planos y escenas épicos, como el rostro de Arthur al comienzo de la película pintado de blanco y forzando una mueca por sonrisa; o esa primera danza como ritual de muerte y liberación comienzo de una metamorfosis que culmina con el baile final, donde Arthur ya transformado en Joker, desciende pletórico los peldaños de una escalera,  que no sólo le baja a los infiernos, sino que le hace poner los pies en la tierra al compás  de un rock and roll, que junto con el "Smile" de Jimmy Durante deviene en banda sonora de su propia catarsis ....;

  En definitiva, una película que entra en la Historia de cine y lo hace por la puerta grande.