La carrera hacia los Oscars daba su pistoletazo de salida el pasado fin de semana con la Ceremonia de los Golden Globes, donde "Anatomía de una caída", Palma de Oro en el pasado Festival de Cannes, se alzó con el Premio a la Mejor Película Internacional. Llama la atención, que precisamente de cara a la pugna por alzarse con ese galardon, pero en los Oscars que se celebrarán el próximo 11 de Marzo, Francia haya optado por presentar el último trabajo del cineasta vietnamita, Trân Anh Hùng, "A fuego lento", que tuvimos el placer de ver en el pasado Festival de cine de San Sebastián, como broche final de su Sección "Culinary Zinema", y que acabaría llevándose el premio del público en dicho apartado.
La película, que cuenta con la actriz Juliette Binoche y el que fuera su pareja en la vida real, Benoît Magimel, como protagonistas, es un auténtico deleite visual en todos los sentidos, pues el espectador asiste ensimismado durante su metraje, a la contemplación de un arte culinario que se antoja, más que cinematográfico, pictórico, donde plasticidad, texturas y aromas tejen un auténtico fresco, en el que el tiempo parece frenarse en seco, para dar paso a un estado de ingravidez que es muy difícil experimentar en nuestros días, y que nos reconcilia con la esencia de un virtuosismo, que más allá de cualquier prejuicio, no hace sino hablar de aquello que le es innato: La pasión, término que, dicho sea de paso, también forma parte del otro título con el que se conoce la película, "La Passion de Dodin Bouffant".
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